Tia, una finlandesa de 30 años, siempre anheló tener su propia casa. Creció en un pequeño pueblo, donde la idea de vivir rodeada de naturaleza la fascinaba.

Sin embargo, al mudarse a Helsinki, se dio cuenta de que comprar o alquilar una vivienda en la gran ciudad era inalcanzable para ella.

Decidida a hacer realidad su sueño, Tia optó por construir su propia casa. A través de Internet, descubrió las minicasas y se sintió atraída por la idea. En 2021, Tia y su padre iniciaron la construcción de su minicasa. Elegieron un terreno en las afueras del pueblo de Sauvo, donde residen sus padres.

Durante seis meses, padre e hija trabajaron juntos en cada detalle. La casa, con una superficie de 23 metros cuadrados (18 en la planta baja y 5 en el ático), fue construida con gran amor y dedicación.

El exterior de la casa está revestido con paneles del taller de su padre, y el tejado está cubierto de tejas metálicas de un vibrante color verde, adquiridas con un 70% de descuento porque a nadie más le interesaba un color tan llamativo.

En el interior, las paredes son blancas y el suelo está compuesto por tablones de madera. La distribución de la casa fue planificada con sumo cuidado.

En la planta baja se encuentran el baño, la cocina y el salón. La cocina está equipada con una placa eléctrica con horno, frigorífico y fregadero. En el salón hay un sofá, un sillón, un televisor y un ingenioso armario debajo de la escalera para almacenar ropa y otros objetos.

En el ático, Tia y su perro Tyka disfrutan de un cómodo descanso. La casa cuenta con calefacción por suelo radiante, ideal para los días más fríos.

Tia se siente muy feliz en su hogar, ya que es perfecto para sus necesidades, pues no requiere mucho espacio. Su casa le permite vivir en armonía con la naturaleza sin gastar mucho en servicios.
A pesar de su tamaño, la casa de Tia es acogedora y funcional. Ha logrado crear un ambiente cálido utilizando colores vivos y muebles únicos.

Las paredes están decoradas con cuadros vibrantes, y las estanterías repletas de libros, recuerdos y fotografías.
Curiosamente, la casa fue construida sobre una plataforma, lo que facilita su traslado a otro lugar. Tia sueña con viajar algún día con su hogar.
La historia de Tia y su minicasa ha ganado tanta popularidad en Finlandia que se ha convertido en una heroína local, destacada en el periódico de su comunidad.

