La madre de una niña estadounidense, que tiene una marca de nacimiento en la cara, anunció que su hija se sometió a su última operación.
Luna, la niña, padece un nevus melanocítico, una gran mancha en el rostro que, aunque no causa dolor, puede convertirse en cáncer bajo ciertas condiciones. Esta marca ocupaba casi toda la cara de la pequeña.
Tras una evaluación, los médicos de Boston determinaron que su tratamiento requeriría más de 100 sesiones de terapia láser y al menos cuatro años de seguimiento.
Fue entonces cuando el cirujano Pavel Popov, de Krasnodar, decidió ayudar a eliminar la mancha de nacimiento de Luna.
Carol Fenner y su hija viajaron a Krasnodar por primera vez en septiembre de 2019 y regresaron a la capital de Kuban en septiembre de 2020.
Durante esta última visita, le extirparon la marca de nacimiento en su mejilla izquierda. El 7 de junio de 2021, Carol informó que ambas regresarían a Estados Unidos debido a problemas con el visado.
El 1 de octubre se anunció que madre e hija volverían a Kuban, y el 9 de octubre, Carol compartió en su Instagram que Luna había pasado por su última operación. La madre comentó que la niña se siente bien, es activa, no se queja de dolor y tiene un buen apetito.
Actualmente, Luna lleva un vendaje en la cara que le impide ver bien, y según su madre, esta fue la última intervención.